Voy a contar ahora algunas cosas del comienzo de mi carrera.A riesgo de motivar mi exclusión de los dinosaurios, les confieso que, sobre cerca de 50 años de ingeniero sólo unos 10 son estrictamente en informática, pese a haber comenzado en 1959 con un curso de programación en una LPG-30 (creo que se llamaba así y era de Smith-Corona Marchantt) en Lehigh University (Bethlehem, Pennsylvania).
Debo hacer una pequeña historia de cómo comencé
5º
MOVIMIENTO: MI VIAJE INICIÁTICO (molto variabile)
Me recibí de ingeniero
industrial el 18 de marzo de 1958.
Mi último examen fue Instalaciones Eléctricas (materias
de la orientación electromecánica que pocos seguían) y gracias a él saqué la
medalla do oro “del curso terminado en 1957” .
El examen tuvo sus
vicisitudes. Saqué la bolilla “medidor
de corriente alterna” y comencé a escribir en el pizarrón ( “examen oral” quería
decir “escrito en el pizarrón ante la mesa examinadora”)
Después de llenar el
pizarrón terminé demostrando, para mi
sorpresa y la del profesor, que
el contador del dispositivo daba como resultado:
¡¡¡U
x I x sen(fi)!!!
Con el mismo aplomo que
ya les he contado en “Pascal or not to be”
Yo -
Esto está MAL, debió salir COSENO
Ing.
Gracia Núñez – Efectivamente esta MAL, ARRÉGLELO
Reviso todo el pizarrón infructuosamente:
Yo
(asustado) – No encuentro el error
Ing.
Gracia Núñez –Vamos a buscarlo juntos
Id –
Yo tampoco encuentro el error. (alivio) Bueno, vaya tranquilo, tiene
sobresaliente.
Esta nota me dio el
infinitésimo en mi promedio que me valió la medalla.
Así comencé mi carrera. Paso
por alto la búsqueda de empleo, que fue muy fácil, en 1958 el país estaba en
una etapa de euforia (Frondizi), remontando el desastre peronista y tuve tres o cuatro ofertas; elegí
Alpargatas por que allí estaba Mermoz, que fue mi colega en el puesto de
Ayudante de TT.PP en el CNBA.
Comencé como ingeniero de
Investigación y Desarrollo que comprendía todo lo que no manejaban alguna otra
persona.
Medí caudal de aire de
trasporte neumático, arreglé un Phmetro electrónico (de una sola válvula,), y
mil otras cosas y cositas y me postulé para una beca en EE. UU.
Logré una cosa parecida:
una “assistantship” (que no era solo estudio sino también trabajo como profesor ayudante)en Lehigh
University, Betlehem, PA, y el 1959 me
marché, con una promesa de guardarme el puesto con la condición de presentarme
dentro del mes de mi retorno.
En EE.UU. tuve la
oportunidad de:
·
Manejarme sin atenuantes en inglés (había solo 2 personas que
hablaban castellano en la U).
·
Experimentar con una organización de enseñanza totalmente
diferente
·
Descubrir que los yanquis eran seres humanos muy parecidos a los
de aquí pero con enormes diferencias de detalle...
Y otras muchas cosas que
motivan a pensar que lo mejor que puede hacer un novato es irse muy lejos, tirarse
a la pileta y nadar.
Entre las cosas nuevas:
descubrí que tenía un “Foreign Students
Advisor” que me ayudó a elegir las materias.
Yo había terminado la
carrera de Ingeniería Industrial antes del agregado de todo lo relativo a la administración de
empresas y así le dije.
Me recomendó algunas como
“Operations Analysis” y además
·
Le sugiero cursar “Computer Programming” ..
·
¡...!.
 |
| LGP-30 ver detalles en: https://en.wikipedia.org/wiki/LGP-30 |
Era una máquina que tenía
como única entada una lectora de cinta de 7 canales y como única salida una
perforadora de lo mismo.
Como memoria un tambor
magnético
Para preparar y leer las
cintas había una “Flexowriter”, máquina usada para enviar cartas donde podía
ponerse nombres y detalles a un texto standard para aparentar una carta
personal.
(un usuario mayor era Billy
Graham que las usaba para fines religiosos)
 |
| otra foto y otro link: |
(Tan elemental que para
parar el proceso recurríamos a que el programa se modificara a sí mismo
(herejía) y grabara encima del programa una letra “Z”)
Para ser breve: Cursé los
dos semestres (1959 a
1960) y se me ofreció la posibilidad de continuar por dos años más.
Si la situación argentina
hubiera sido como es hoy lo razonable hubiera sido quedarme. Pero en 1960 la Argentina estaba en una
formidable ascenso, a tal punto que mis compañeros en EE. UU. me preguntaban
para ver la posibilidad de ir ellos. (presidencia Frondizi), y algunos
vinieron.... así que me volví
Los viajes de los becario
se hacían en barco, que era más barato que el avión, así que disfruté de un
paseo de 15 días por el Caribe en el “Río Tunuyán”, uno de los tres barquitos que Dodero hizo para su disfrute
personal, el de Perón y el de Duarte.
Y en ese viaje me enamoré de una estadística
matemática (no la T
de Student ni la Chi Cuadrado
Al recibir alguno de mis
envíos anteriores Hernán me había pedido poner algo mas sexy, pero son cosas personalísimas,
que no se cuentan.
De vuelta a Alpargatas
seguí con trabajos parecidos a los anteriores, aunque condimentados con Investigación
Operativa, (programación lineal y Pert) que primero procesé a mano y después
con el uso de la computadora de IBM de la Diagonal Norte.
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Ricardo dijo...
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Ricardo dijo...
Hola, Rodolfo. No esperaba encontrarte también por acá. Supongo que fuiste vos quien le pasó mi mail a Hernán.
No conocía nada de esta historia tuya. Muy buena y bien escrita.
En cuanto a lo de sexy que te pidió Hernán, me parece bien que no incluyas intimidades.
Yo, para eso, no tengo problemas. Las incluyo en mis cuentos y en la novela que escribí hace muy poco (algo al respecto va a aparecer en este blog pronto, me imagino). Pero como uno, en un cuento o novela) puede incluir historias tanto falsas, verdaderas, o falsas con un poquito de verdad, mintiendo que "los sucesos aquí relatados son sólo producto de la imaginación del autor...", nadie llegará a sospechar cuánto de verdad haya en estas "confesiones" (la mayoría de las veces escribo en primera persona).
Así que animate, escribí un cuento medio real y medio falso, y ya veremos. No es difícil.
Un abrazo.
No conocía nada de esta historia tuya. Muy buena y bien escrita.
En cuanto a lo de sexy que te pidió Hernán, me parece bien que no incluyas intimidades.
Yo, para eso, no tengo problemas. Las incluyo en mis cuentos y en la novela que escribí hace muy poco (algo al respecto va a aparecer en este blog pronto, me imagino). Pero como uno, en un cuento o novela) puede incluir historias tanto falsas, verdaderas, o falsas con un poquito de verdad, mintiendo que "los sucesos aquí relatados son sólo producto de la imaginación del autor...", nadie llegará a sospechar cuánto de verdad haya en estas "confesiones" (la mayoría de las veces escribo en primera persona).
Así que animate, escribí un cuento medio real y medio falso, y ya veremos. No es difícil.
Un abrazo.
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TU MAIL ME LO PASÓ CARLOS TOMASSINO, RICARDO.
HERNÁN