24/01/2021: Hernán Huergo: Encuesta Dínica 2020

18/8/2020: Volví del Mater

 1. ¿Qué descubriste este año en cuanto a expresiones artísticas, películas, libros, cursos, música, teatro, televisión? No importa si fueron presenciales o virtuales.

Tengo 77 años. El promedio de vida del Homo sapiens, según Internet, es de 79 años. Estoy en prisión domiciliaria, puede que hasta el fin de mis días.

Uno de mis programas favoritos, típico argentino como soy, era ir al cine (NO) y después ir a comer algo (NO). Aclaro que ese símbolo, (NO), corresponde a la respuesta habitual de Silvia, mi mujer, cuando le propongo cualquier aventura que signifique escapar al menos por un rato de la prisión domiciliaria. Recorrer en auto nuestra ciudad está permitido, hay lugares preciosos.

Tengo tres hijos, todos casados, siete nietos, me encantaba verlos a todos, por supuesto. Hoy siempre nos proponen programas pero (NO). Prácticamente los dejé de ver, salvo por Zoom o Whatsapp. 

Me encanta Borges, que leo y releo con placer, también leo y releo El Quijote sin entender su fama. Ocasionalmente leo muchas otras cosas, admiro a Fernández Díaz.

Me gusta escribir. Mis libros sobre el bisabuelo Luis, algunos otros, de famosos del ajedrez y de cuentos. Crónicas de todo tipo de reuniones con diversos grupos. Mis Blogs, tengo unos cuantos. Del Blog de Dinos y Dinas, mi pasión actual, disfruto en especial los Conversando, que me permitieron descubrir muchas cosas de mucha gente, y también cosas de mí mismo.

Me encanta el ajedrez, ahora pasé del presencial al ajedrez por Internet, no es lo mismo.

Me encanta el tenis, recibí como recomendación de pandemia el (NO) pero apliqué la desobediencia debida. Juego dobles los sábados y tomo clases los miércoles.

Recibo cientos de whatsapp por día, pero no encuentro el tiempo de consumir los mil videos, aunque cada tanto descubro alguna perla. No sufro demasiado por todas las que no descubrí.     

2. ¿Qué comidas y/o bebidas descubriste este año?

Ningún descubrimiento. Extraño los almuerzos al aire libre. Muchísimo. Estoy en campaña para retomarlos pero por ahora no pude vencer el (NO).

3. ¿Qué herramientas de las TIC aprendiste, o te enriquecieron este año tu vida? Por ej., una aplicación, un teléfono móvil inteligente, un sitio web….

Suelo aprender lo que necesite para mis hobbies. Por supuesto el Zoom y todos sus congéneres están en esta lista. Sumé programas múltiples, como el Movavi, el Debut, el Arena y algunos otros. Todo lo que preciso me las rebusco para descargarlo y usarlo sin cargo. Sigo aprendiendo cosas nuevas del Photoshop. También del Blogger.

4. A pesar de la pandemia, ¿pudiste descubrir algún lugar nuevo, o realizar algún viaje o una experiencia presencial? Si fue así, ¿cuál, cómo y dónde fue?

Los recorridos en auto con mi mujer me han confirmado que Buenos Aires es una ciudad bellísima en muchos de sus lugares.

Fuera de eso: (NO), (NO), (NO). Estoy en prisión domiciliaria, puede que hasta el fin de mis días.

5. Tu logro o meta personal, laboral, profesional este año, ¿fue alcanzado? Puede ser uno o varios por cada área.

No sé si llamarlos logros o metas. Creo que intento disfrutar de la vida. Disfruto con las cosas que hago para el Blog. Disfruto los Zoom o similares que organizo no sólo para Bit40 sino para media docena de grupos más, el más especial con hijos y nietos. Disfruté y fue logro mi participación en la JAIIO 49, no por mi presentación de los Conversando, odié que me dieran pocos minutos y para mí fue un desastre, sino por la presentación plenaria que pude hacer sobre Luis Huergo a los 150 años de ser el 1er ingeniero, que fue emocionante para mí.

Pero quizás el logro personal más importante fue haber sobrevivido. Lo digo más en serio de lo que les pueda parecer. Pero les cuento esto en los ítems que siguen.

6. Ahora te ofrecemos un espacio libre de 10/15 renglones para que pudieran agregar aquello que quisieran compartir y que no apareció en ese cuestionario  en particular, logros y/o metas personales, laborales, profesionales que te propones  alcanzaron en 2021.

Empezó hace unos años, quizás como diez. Yo pesaba entonces 85 kg. Problemas respiratorios, tos con catarro, sinusitis, dormir mal, cansancio progresivo cuando jugaba al tenis, pérdida de peso, etc. etc. Polisomnografías de resultados espantosos, apnea avanzada. Los tratamientos y remedios se fueron sumando, incluyendo alguna operación inútil en el Instituto Arauz. El clínico y el neumonólogo de acuerdo en diagnóstico y tratamiento. Pero sin resultados. 

Así llegué al 20 de marzo del 2020. Pesaba 67 kg, 18 kilos menos. Mis salidas eran a la farmacia, debajo de mi casa, al chino, supermercado pegado a la farmacia. Ir a una confitería a tres cuadras de mi casa me llevaba 20 minutos de ida, porque una de las cuadras era cuesta arriba. Ir a otro supermercado a dos cuadras me costaba un triunfo. No soportaba el barbijo dentro del local. Volver a casa con la bolsa de 10 kg me llevaba también veinte minutos, debía realizar paradas de descanso cada 10 metros.

7. Por último, también un espacio libre para que agregues aquello que no apareciese en este cuestionario y que consideras que vale la pena mencionar. 

El martes 11 de agosto, ya en el colmo del agotamiento, lo llamé al clínico. Por suerte tiene el consultorio frente a mi casa. Cruzar la calle, tomar el ascensor 3er piso, caminar, tocar timbre, llegué agotado. Auscultación y palabras del médico: "Se va ya al Mater Dei, es muy urgente". Volví a casa, avisé, agregué a mis bolsillos el cargador del celular y taxi. ¿Me acompañó alguien? (NO).

En el Mater me esperaba una comitiva de médicos, directo a unidad coronaria. Tests PCR, me hicieron dos, negativos. Neumonía. Más embolia pulmonar en progreso. Saturación de oxígeno en sangre, 83%, desastre. No sé si saben que lo normal es mínimo 95%. En dos días se dominó la embolia y la neumonía y pasé a cuarto normal, ¡en Maternidad! 

A la semana me despacharon a casa, donde me esperaba el oxígeno. 18 de agosto. Unos días después llegué a 95% y me desconecté. Aleluya provisorio. Una semana después comenzó a renovarse el calvario. Saturación bajó a 89%. Entonces decidí seguir el consejo de mi hija Florencia: “Llamalo a fulano, es un neumonólogo fuera de serie”.

No era de mi obra social pero decidí que valía la pena. Lo fui a ver, me dio casi los mismos remedios que los otros dos médicos. Seguí sus indicaciones al pie de la letra. De pronto, todo empezó a mejorar a la velocidad de luz. Sobreviví. Subí ya seis de los kilos perdidos, tengo una saturación del 97%, juego al tenis sin cansancio alguno y también recuperé parte de mi nivel ajedrecístico perdido.

“Doctor, usted me recetó casi las mismas cosas que no me habían dado resultado antes. ¿Cómo explica esta enorme mejoría?”. La respuesta me sorprendió: “¿Usted sabe lo que es un buen chef? Muy bien, todos aplican los mismos ingredientes, pero los buenos chefs son los que obtienen los mejores resultados”.

Estoy en prisión domiciliaria, pero disfruto vivir estos días esta recuperación de mi salud. 

Cada nota incluirá una foto y una auto presentación de no más de cinco (5) renglones que cada uno quisiese.

Mantengo unos cuantos Blogs. Mi pasión es el de Dinos y Dinas.

Soy ingeniero, informático, consultor, cronista, bloguero, periodista aficionado, buen ajedrecista, mal tenista, ex docente UBA y UCA por 20 años, ex USUARIA por 25 años hasta presidente, marido, padre y abuelo.

Sobreviviente.